Rodar y rodar

Había una vez una tapatia que recorría la blogosfera repartiendo sonrisas, siempre con su sombrero charro de jinetear.

Podía vérsela por todas partes, dejando unas palabras amables aquí y allá, siempre era bienvenida. Y si yo la veía en la lista de seguidores me decía a mi misma: está  la tapatía, este es un buen sitio.

Y cuando ibas a su blog te recibía con un revoloteo de faldas de colores y sones de mariachis: ay Jalisco noo te raaajeesss...y otras veces cantaba: Guadalajara en un llano, México en una llanura...., siempre haciendo honor a su tierra....

Y un buen día se dijo a sí misma, y lo puso por escrito, que al primero que hablara le mandaría un regalito. Y luego amplió al segundo y al tercero y al cuarto...y ahí estaba yo!!

Y me mandó no uno ni dos, sino tres tapetillos de ganchillo, de hilo finiiiiiiiiiiisimo, nada que ver con lo que hago yo, mis gafas sin visión periférica no me dan para tanto:

Son hermosos!! Gracias RosaMargarita !! Como te dije, los mimaré...

Y, como yo tenía desde hace meses una mesa que el vasco me subió un buen día de la cabaña de chapucear que no había puesto de largo aún - siempre hay que tener balas en la recámara- y está hecha a base de círculos tejidos con un hilo un poco más potente que el de RosaMargarita, me pareció que casaban bien 

y como siempre, me puse a enredar un poco....

y se me vino a la cabeza aquello de rodar y rodar, rodar y rodar 

no sé si por cantarlo a dúo con RosaMargarita o por tanta rueda....

...y el caso es que de las mismas américas, un poco de más al sur que la tapatía es mi yerno, uruguayo celeste, que hoy está de cumpleaños: FELICIDADES RICARDO !!