Y me pareció que algo se movía y huía a toda prisa.
Era algo pequeño, así que pensé en una ardilla.
Pero al llegar a casa, una pequeña criatura me esperaba:
Mi hijo Angel, que para eso ha pasado varios veranos en Irlanda, me dijo: es un leprechaun, un viejo duende irlandés que esconde al final del arco iris una olla llena de oro y tesoros.
Ostrasss...y yo sin arco iris hoy! tuve que recurrir a mi arco iris de hace unos días y seguirlo pasito a pasito...y oh sorpresa! Encontré no un tesoro, sino varios...
...porque el leprechaun, que al final confesó haber venido a ver si encuentra por aquí algún trasno tataranieto suyo no viajó sólo, se trajo el dormitorio completo, yo sólo tuve que prestarle los muebles. Venía con una cariñosa postal que me enviaba, con todo lo demás, MariaIreland desde la verde Irlanda. Mil gracias María!!!
Pero hay más, me dijo, porque me encontré por el camino al cartero . Más?? En un solo día ? Más?
Sí, había más. Desde la verde Cantabria, anisnofla me envía una amapola que ha dibujado con sus minúsculos puntos de cruz. Es hermosa!! Añoro las amapolas...! Gracias May, me llega al corazón, algún día hablaré de las amapolas...
Y, como aquí las lluvias apenas dejan ver el cielo, Segmentito ha salido a buscar azules y blancos y me los ha puesto en una cestita:
Gracias Pilar!!!
Y miren que bien casa todo y como mi chimenea parece estar ya de Navidad:
Además, Carolyn me envía una vez más un patrón para confeccionar estas preciosas muñecas:
Claro, y con los saltos de alegría y con los enredos, me despisté un poco del leprechaun, le perdí de vista, y como hacen siempre que les pierdes de vista desaparecen, y entonces ya no hay posibilidad de encontrar su olla de oro. Pero...para que quiero la olla de oro si ya tengo mis tesoros??
GRACIAS AMIGAS!!
( no se pierdan sus blogs en los enlaces y si no se han apuntado a mi arco iris ustedes verán, hasta el 12 de diciembre están a tiempo...)